Graciela Krichesky – La dimensión pedagógica de la tarea del director: la observación de clases
Nadie duda que los procesos de enseñanza y aprendizaje que ocurren en las aulas constituyen el corazón de la escuela. Investigaciones realizadas en todo el mundo muestran que las buenas prácticas en la enseñanza no solo están acompañadas por buenos docentes, sino que también la práctica pedagógica del director influye en que en la escuela se aprenda, no obstante, es habitual escuchar a mis colegas directores que esta es la tarea de la dimensión pedagógica es la que le presenta el mayor de los desafíos. Las otra dimensiones de su trabajo cuando se ocupa de cuestiones institucionales, comunitarias, administrativas; ocupan un tiempo que no siempre dejan espacio para su práctica pedagógica, esto es hasta paradójico, porque lo central de las escuela es la enseñanza, y el director debería ocuparse de los central de la escuela y muchas veces esto le resulta imposible.
¿Cómo se construye la dimensión pedagógica de la práctica del director?
Una puesta de entrada posible, es a partir de las observaciones de clase, el director tiene que construir un rol de asesor, de poder asesorar a sus docentes, que no es lo mismo que capacitar, es acompañar a sostener las practica, a abrir espacios de diálogo, espacios de escucha, espacios para desnaturalizar lo que el profesor ya tiene naturalizado, y este es una espacio a construir entre el director y el docente.
Un director no solamente puede, sino que parte de su práctica pedagógica consiste en acompañar, asesorar, e implica un trabajo colaborativo.
Un director no debería tener todas las respuestas, no se espera que las tenga, pero si puede tener un espacio de interrogación, de pensar juntos con un colega profesor para inaugurar otras prácticas en el aula.
¿Qué observa el director cuando observa una clase?
La observación es una práctica situada que tiene que ver con muchas cuestiones ligadas con su institución, ligadas al docente que va observar, a los estudiantes. Hay algunas cuestiones básicas ligadas a la observación que podrían estar presentes en todo acto de observación que realiza el director en su escuela, por ejemplo ¿Qué ocurre con el contenido de la enseñanza? . La información que circula en el aula tiene que ser clara, ese en un requisito, esto no quiere decir que la clase comience con información clara, porque tal vez comience con una pregunta y recién al final de la clase se llega a aclarar el enigma, pero lo que quiere decir que en algún momento de la clase tiene que quedar claro para los estudiantes ¿qué se estuvo aprendiendo?, ¿que se estuvo enseñando?, ¿sobre qué trató la clase?…
FUENTE: CIPPEC – Fundación Navarro Viola
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