Los protocolos para la atención de la violencia escolar tienen como objetivo ofrecer a las escuelas los procedimientos para una atención oportuna, efectiva y reparadora de las situaciones de violencia y acoso que pudieran presentarse en sus instituciones.
Estos procedimientos de atención son liderados por el director junto con el coordinador de tutoría y el responsable de convivencia escolar del Comité de Tutoría y Orientación Educativa, siendo también muy importante el apoyo de los tutores, los docentes, los familiares y los estudiantes.
Para este fin se presentan cinco (5) protocolos diferenciados según el tipo de violencia y el agresor, de la siguiente manera:
SITUACIONES DE VIOLENCIA ENTRE ESTUDIANTES
Protocolo 1: violencia psicológica y física (sin lesiones)
Protocolo 2: violencia sexual y física (con lesiones y/o armas)
SITUACIONES DE VIOLENCIA DEL PERSONAL DE LA IE HACIA ESTUDIANTES
Protocolo 3: violencia psicológica
Protocolo 4: violencia física
Protocolo 5: violencia sexual
SITUACIONES DE VIOLENCIA DE UN FAMILIAR U OTRA PERSONA HACIA ESTUDIANTES Protocolo 6: violencia psicológica, física y/o sexual
Asimismo, debido a su complejidad, la atención de la violencia requiere la intervención de diferentes servicios especializados (sociales, policiales, judiciales, de salud, etc.), que garanticen un procedimiento respetuoso de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, con celeridad, justicia y sin revictimización.
Es por ello que los protocolos proponen a las escuelas una aproximación multisectorial e interdisciplinaria para el abordaje de las situaciones de violencia escolar.